A NUEVE AÑOS DE ¿LA POLÉMICA?

No quisieron cobrarla

Un día como hoy, pero del año 2002, Argentina cayó frente a Yugoslavia en la Final del Mundial Indianápolis 2002. Fue por 84 a 77 , en un encuentro que siempre quedará marcado en la historia del básquet por los evidentes errores arbitrales que perjudicaron a las Selección Nacional. Solamente tenían que hacer sonar el silbato. 

En un partido jugado de excelente manera por ambas selecciones, quienes no estuvieron a la altura de las circunstancias fueron el dominicano Reynaldo Mercedes y el griego Nikos Pitsilkas, jueces designados. En una polémica definición el perjudicado fue el más débil a nivel escritorio. Dos fallos claros. Primero la falta inexistente que le cobraron a Luis Scola sobre Vlade Divac, cuando el partido estaba igualado en  75. El gigante yugoslavo falló los dos a falta de 5 segundos. De ahí nació el contrataque de Hugo Sconochini, que cuando penetró hacia el aro recibió un evidente empujón, jamás pitado por los árbitros. A pesar de las protestas, la final fue a suplementario y Yugoslavia se quedó con el oro.

El dominicano Mercedes, fue uno de los responsables de aquél bochorno y actualmente esta dirigiendo el Torneo Fiba Americas. En una entrevista que le realizaron recientemente, dijo: "Tengo la conciencia tranquila porque no lo veo como una equivocación. Yo siento que ese contacto no merecía ser pitado, no se podía definir la final con libres con lo que pude ver. No fue evidente". 

Incomprensible, pero lamentablemente muchas veces el deporte tiene estas definiciones.

Fuente entrevista: Diario Olé